Pocos analistas deportivos fueron capaces de prever lo que dio de sí la tercera carrera del Campeonato Borjado de Race Formula. Tras el parón veraniego tocaba visitar las frías pistas de Spa, con la vista más en el cielo que en la pista, pendientes todos de los caprichos atmosféricos. Los pilotos estrenaban nuevos patrocinadores, la popularidad del campeonato empezaba a hacerse notar: invitados de la jet set, fiestas privadas en los motorhome, cacareadas discusiones entre pilotos, resquemor en cada curva…un espectáculo a todos los niveles.
La calificación confirmó lo que ya se preveía, los McLaren dan un paso adelante en el tiempo por vuelta y coparon la primera línea con Senna a la cabeza. Por detrás quedarón Alberto Gugelmin, Dessmond Alesi y Eden Nanini, el grupo de mayor tensión fuera de la pista, abocados a encontrarse en la primera curva. Mymenda Prost quedaba más rezagado e iba a tener que arriesgar para no quedar descolgado.
Y al salida ya dio pistas de lo queiba a ser la carrera. Gugelmin arrancó de forma espectacular, arriesgó de lo lindo en Eau Rouge y se colocó a la estela de Senna. Por detrás Alesi y Nanini lidiaban con el McLaren de Berger y Prost se quedaba cortado detrás de los Williams de Patrese y Boutsen.
El primer cuarto de carrera fue un monólogo de Gugelmin. Con unas nuevas acometidas a Eau Rouge, lograba no solo ponerse en cabeza, sino alcanzar una ventaja de casi medio circuito sobre el segundo clasificado. El líder del campeonato bregaba con los McLaren y Nanini veía como era alcanzado por Prost.
Sin embargo la lluvia caía intermitentemente y tanto Gugelmin como Prost y Berger tenían salidas de pista, lo que provocaba que Alesi y Nanini avanzaran un poco. La desventaja, aun así, seguía siendo bastante grande.
Con las primeras entradas en boxes, todo se redujo a una tripleta de cabeza con Gugelmin, Alesi y Nanini, el cual incluso llegó a ser líder de carrera. La lucha se mantuvo durante 4 ó 5 vueltas y dio lugar a escenas impactantes, al límite de pilotos y neumáticos.
Con la llegada de la lluvia empezaron a tomarse decisiones que iban a influir en el devenir de la carrera. La mitad de los pilotos se mantuvieron en los neumáticos intermedios con la esperanza de que la nube se fuera, y los demás optaron por neumáticos de lluvia. La carrera, una vez pasado el ecuador, sigue dividida entre la cabeza, con Gugelmin dando gestiones magistrales, perseguido incansablemente por Alesi, y Nanini y Prost gestionando su lucha con los adelantamientos a doblados.
Apenas a 10 vueltas del final, Prost sigue remontando desde el final. Nanini se queda prácticamente sin chasis y se queja amargamente de que los comisarios están siendo condescendientes con los doblajes de Prost. El aspecto de su coche es el de un coche de rally. La grada de aficionados ovaciona a los pilotos, que se están jugando en cada curva, su integridad en pos de la gloria.
Y justamente, cuando Gugelmin vuelve a obtener una cómoda ventaja, Eau Rouge se cobra su víctima. Prost no se conforma con el podio en la carrera, quiere alcanzar a Alesi y presionar a Gugelmin, pero pierde el control del Ferrari y se estrella en las protecciones a casi 300Km/h. El impacto es fuerte, parece que el piloto está bien, pero a pocas vueltas del final los comisarios deciden sacar el Safety Car. Gugelmin se desespera, toda la ventaja obtenida en carrera se esfuma, Alesi de nuevo está a su cola y tiene los neumáticos y la carga de gasolina perfecta para atacarle al entrar más tarde en boxes. Nanini ve como no puede disponer de la plenitud de su coche pero ve el podio más cerca, para ello tendrá que adelantar a ambos McLaren.
Como se temía, Alesi adelanta a Gugelmin a dos vueltas del final, incapaz de defender la posición. Se desespera el brasileño, que ha comandado el GP en un 90% de las vueltas y que por un accidente ajeno, ve escaparse la victoria. Nanini no llega al podio, se queda a las puertas de adelantar a Berger, que consigue el primer podio de McLaren.
Al bajarse del coche, Alesi casi no celebra la victoria, de nuevo un efecto ajeno le brinda el GP en bandeja, es agridulce y solo acierta a intercambiar unas pocas palabras con el brasileño, que consigue su mejor resultado de la temporada pero a todas luces insuficiente tras lo visto en la pista. Nanini sigue quejándose a los jueces horas después, cree que la imprudencia permitida a Prost durante la carrera ha afectado a su posición en el campeonato, ve que Alesi se escapa y que hemos llegado a la mitad del campeonato. De Prost dicen que salió sonriendo del coche, a la RAI italiana, cuando casi todos descansaban ya, declaraba: “Sí, he hablado con Dios en Eau Rouge, pero no me he querido sentar más rato a charlar con él, me sigue llamando la gloria”.
Clasificación:
1º Alesi 10 puntos
2º Gugelmin 6 puntos
3º Berger 4 puntos
4º Nanini 3 puntos
5º Senna 2 puntos
6º Patrese 1 punto
GENERAL
1º Alesi 30p
2º Nanini 15p
3º Gugelmin 12p
4º Prost 8p
5º Senna 5p
6º Berger 4p
7º Patrese 4p